jueves, 11 de octubre de 2007

Hojas muertas, recuerdos vivos.

Esa tarde...

Aquella tarde el humo de su taza de té verde-cereza le pegaba en el rostro simulando la confusión de sus ideas. La laptop, la grabadora USB y los 2 célulares, era el inventario que estaba sobre la mesa 7 de la cafetería "Catedral". Aquel 9 de Octubre,nublado, templado y agradable estaba llegando al momento del ocaso. Xavier había ordenado unos bisquetes con mantequilla para acompañar su inusual bebida, pero no estaba de humor como para café, quería relajarse, necesitaba aclarar su mente. Fue una buena decisión llegar media hora antes a la cita, era tiempo suficiente, pensó. Abrió la cajetilla de sus Camel Natural Flavor, sustrajó uno ,lo acercó a su boca y lo encendió. Inhaló con los ojos cerrados, exhaló...

Habían pasado 2 años desde aquel día en el que ella había puesto fin a su relación. Xavier recordaba perfectamente bien aquellos meses posteriores, amargos, sombríos. Dificilmente se afeitaba, se había salido de su departamento para escaparse de su aroma, todo estaba impregnado de su escencia. Así había deambulado como un zombie en la selva urbana, hasta que un día cualquiera encontró a Andrea. Ahora, ahora estaba casado felizmente (al menos eso se estaba repitidiendo incesantemente) con Andrea, a quien amaba. ¿Por qué ahora?...¿Sería que su estabilidad emocional era sólo un débil cascaron?. El cigarro se había consumido en el cenicero, al igual que sus neuronas, estaba agotado. Ni siquiera sabía por que había accedido a tomar café con ella esa tarde. Miró el reloj; faltaban 20 minutos aún para la cita. ¿Y si se marchaba?. Algo lo mantuvo atado a su silla. Quizá la falta de una explicación era lo que lo había atormentado, quizá la falta absoluta de comunicación de ella hasta ahora, quizá nunca la había olvidado, quizá...

Marlene ni siquiera una nota había dejado para Xavier ese día. Jamás lo había llamado hasta ahora. No quisó contarselo por teléfono, ni por carta. Había decidido que si lograba superar esa prueba de la vida, entonces se lo diría a Xavier, de lo contrario no valía la pena, quería que la amara no que le tuviera lástima. Ella pensaba que ese caracter ferreo y la esperanza de volver con Xavier era lo que la había ayudado a vencer el Cáncer. Marlene era Lic en Administración de Empresas y al igual que Xavier tenía 32 años, su vida cambió cuando supo que tenía cancer, se marchó sin dejar aviso alguno, a meses de la boda. ¡Cuanto lo había extrañado en estos años!, el recuerdo de su aroma a cedro, de aquellas tardes en el café, de la cálidez de sus abrazos, añoraba despertar abrazada a él...Invadida de recuerdos, conducía Marlene su vehículo hacia el lugar de la cita, escuchó la hora en la radio; tenía 10 minutos para recorrer las 8 cuadrias que quedaban. Estaba tan emocionada!.
Xavier había decidido marcharse, apagó su cigarro en el cenicero, bebió de su té, pagó la cuenta y le pídió al mesero que entregara una nota a la señorita que iría a buscarlo en unos minutos más, extendió su mano con la nota y la propina por los servicios. Recogió su saco, guardó su laptop, tomó su cajetilla. Llamó a Andrea por 5 ta ocasión, ¿Dónde estaba ahora que necesitaba tanto escuchar su voz!?...Tan concentrado estaba en la llamada que no notó como Marlene se aproximaba hacia él , hasta que ella lo cogió del brazo.
-¿También vienes llegando?-, dijo como si nunca se hubieran separado, natural, fresca incluso cariñosa.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

jobo a ver si dejas de escribir tantas historias a medias eh primero termina la ke vas escribiendo y ya luego empiezas otra porfavor
anonimo...

JAVIER RETA dijo...

si jobitux, interesante historia, pero como que las vas concluyendo no?
¿Por que será que siempre se asocia las hojas muertas al recuerdo o el olvido? Eso me recuerda a este poema, que va muy bien con este post

HOJAS MUERTAS

Hojas muertas que el olvido
va arrastrando en mi memoria
cubriendo así nuestra historia
sepultando lo vivido
sin perdón, hoy, dividido...
se he quedado en el recuerdo
y en mis labios que hoy me muerdo
para no decirte nada
de tu boca y tu mirada
de aquel adiós congelado
como un puñal se ha clavado
sobre mi alma desolada

Como una sombra vagando
me iré gastando la vida
ya no hay razón ni salida
ni voz, ni rumbo, ni mando
no hay lágrimas de vez en cuando
no hay dolor en mi cabeza
(tal vez algo de tristeza)
que indica que fui un cobarde
dejándote ir esa tarde
por mi orgullo y mi torpeza

Ahora que ya no es posible
hacer que ese tiempo ingrato
en que rompimos el trato
de una unión indivisible
perderte es algo insufrible
que me obliga a preguntarte
si algún día podré amarte
con ese amor tempestuoso
tan violento y tan hermoso...
di ¡se puede! ¡de tu parte!

AUTOR: *Salvatore* (México)

JoBITuX dijo...

Pues con respecto a las Historis Inconclusas, he de decir amables lectores y críticos que no es a voluntad, simplemente hay momentos en los que las palabras toman forma en mi cabeza y pues puedo escribirlas. Pienso que si me propongo terminarla o concluirla pues , perdería su escencia inspiratoria. Pero buenas noticias, Hojas Muertas tendra continuación muuy pronto. Espero poder publicarla hoy por la noche!. Esten pendientes !

Gracias por los comentarios!

Sagrav dijo...

que historia tan misteriosa, que sentimientos encontrados, que encuentros inesperados, que inesperadas llamadas, que llamadas sin respuesta, que respuestas tan añoradas, que añoranza la del otoño, y...que bonito poema

jaja, no se rian de mi comment pero esq hace rato lo escribi mas inspirada y se me olvido publicarlo oficialmente, pero la ideaq mas o menos es la misma ;) Me gustó mucho la primera parte, ojala el final esté así de suculento :p

XOOOxoX